miércoles, 26 de marzo de 2014

El contagio del Suicidio.•*¨✿.¸.✿ ´¯`•->❥ Dr. Esteban Braham

 

A manera de confesión quiero declarar que evito ver las noticias en la televisión por su continuo mensaje de desesperanza, sin embargo los titulares del periódico lo acostumbro por la facilidad que la tienda de enfrente de mi casa me proporciona; frecuentemente me molesto por la explicita violencia que se muestra sin pudor, solo algunas veces el enojo pasa a la indignación, sobre todo cuando se manejan temas de salud mental con la acostumbrada ignorancia de los medios.  Tal fue el caso de una sonada noticia en la semana, donde con tintes amarillos describen el suicidio consumado de un hombre que sin duda cursaba con un trastorno psiquiátrico sin atención, ya no importa hablar de él, es demasiado tarde, pero podemos tomarlo de ejemplo para ayudar a más personas y no solo alarmar a la población con noticias irresponsables, que pueden incentivar a cometer un acto similar a los que están en una situación parecida, esto se conoce como “contagio del suicidio”.
Los medios de comunicación pueden minimizar el riesgo de contagio proporcionando una información concisa de los suicidios. Las noticias sobre suicidios no deben ser repetitivas, porque la exposición prolongada puede aumentar la posibilidad del contagio en personas vulnerables. El suicidio es el resultado de muchos factores, por lo que el reportaje no debe dar explicaciones simplistas, como por ejemplo que un evento negativo reciente en la vida de la persona ha sido la causa del suicidio. Tampoco se debería divulgar una descripción detallada del método de suicidio utilizado, glorificar a la víctima ni señalar que el suicidio fue efectivo en lograr una meta personal.  Estas mismas recomendaciones deberían aplicarse a la información que se divulga a través de Internet, dado el uso masivo y cotidiano de esta fuente de información.
El suicidio es una situación que tiene varios factores que la hacen nacer y crecer, no es solo una ocurrencia espontánea y dramática.  La mayoría de los intentos suicidas están realizados por personas que cursan alguna enfermedad mental, incluso el 70% de ellos padece depresión grave, y el resto se distribuye entre esquizofrenia, bipolaridad, obsesivo-compulsivo, ansiedad, trastornos de personalidad y consumo de drogas.  Sería importante que los medios de comunicación informaran las verdaderas causas y sobre todo las vías para encontrar ayuda.
Existen factores estresantes que pueden precipitar el intento suicida en personas  vulnerables, tales como: Una discusión con una persona importante o con alguien amado. La ruptura o pérdida de una relación afectiva.  El suicidio de un familiar, de un amigo o de un personaje público.  Abuso de alcohol o de otra sustancia.  Un reportaje sobre el suicidio o métodos de suicidio.  La aparición o el agravamiento de una enfermedad física o mental.  Cambios inesperados en las circunstancias de la vida como enfermedades crónicas o de transmisión sexual.  Experimentar un acontecimiento vital traumático, como abuso, acoso o violencia. Pérdida de estatus social.
El suicidio es impredecible, sin embargo podemos distinguir en la conducta del paciente datos de alarma que nos lleven a ofrecer y garantizar la atención oportuna.  Las siguientes conductas son frecuentes entre personas que están considerando quitarse la vida: Amenazan con dañarse o matarse. Buscan medios para suicidarse o hablan de un plan de suicidio. Hablan o escriben sobre la muerte, el morirse o el suicidio (sobre todo cuando esto no era propio de la persona o era muy raro). Expresan sentimientos de desesperanza, ira, rabia o venganza. Se involucran en conductas que implican un riesgo innecesario o que son irresponsables. Expresan sentimientos de estar atrapados, de no ver una salida. Incrementan el uso de alcohol u otras drogas. Se retiran o evitan el contacto con amigos, familias o su entorno. Se muestran ansiosos o agitados. Hay patrones anormales de sueño, como el no dormir o el dormir todo el tiempo. Cambios dramáticos en el humor, tales como sentimientos de alegría tras un largo período de tristeza o depresión. Se desprenden de sus posesiones o se despiden de su familia y amigos. Pierden el interés en actividades placenteras. Dicen que no hay razones para vivir o que la vida es inútil.
La soledad es un factor de riesgo que incrementa la ideación suicida, ya que en solter@s, viud@s o divorciad@s se observan en mayor medida intentos de suicidio.  El sexo masculino es quien más efectividad tiene en sus intentos, y el femenino el que más intentos tendrá.  Sin embargo esto no es ley, así que si conocemos a alguien que no cumpla con lo antes explicado no por eso debemos minimizar que presente ideas o intentos suicidas, es un error creer que solo se quiere llamar la atención.
La vida a pesar de estar llena de cosas hermosas, necesita de una eterna vivacidad para encontrar experiencias que nos llenen de alegría y placer pleno. Se necesita ser un rebelde para enfrentar la absurda realidad en la que nos sumergimos diariamente.  Es un constante acto de fe, la única alternativa que tenemos para descifrar el código que nos lleve al sentido de la vida.  Embriagarnos de experiencias que nos acerquen a nosotros mismos, explorar lo profundo de nuestro ser y renunciar a lo hueco superficial, son las herramientas para encontrar que el camino está en disfrutar de las cosas pequeñas, los diminutos milagros que ocurren a cada instante. . . agradecer por ellos y captarlos como lo hace una cámara fotográfica, almacenarlos y recordarlos cuando el entorno parezca un sin sentido.  Aunque cada mañana nos acercamos un poco más a la muerte, es en el amanecer donde hay que gritar al infinito: 
“La vida es sagrada al igual que la muerte” y por lo tanto con nuestras acciones honrarla, bendecirla, lucharla, defenderla, disfrutarla y gozarla al máximo, para que cuando llegue el momento podamos recibir la muerte con una sonrisa de satisfacción.
Dr. Esteban Braham (consultoriaonline.com.mx)
fuente: medicodelalma
Foto:Sueños del Bosque
Orientar, expandiendo Conciencias .•*¨.¸. ´¯`•->


domingo, 23 de marzo de 2014

24 de Marzo...Memoria, hoy y Siemprei✾¸.★*´✾¸.★*´




El 24 de marzo de 1976 comienza en el país una dictadura que se cobró la vida de 30.000 personas y desmanteló el aparato productivo del país...





 El 24 de marzo de 1976 un golpe de Estado cívico-militar derrocó al gobierno constitucional de la presidenta María Estela Martínez de Perón e instauró una dictadura que gobernó la Argentina entre 1976 y 1983 a través de una Junta Militar encabezada por los comandantes de las tres Fuerzas Armadas: Jorge R. Videla (Ejército), Emilio E. Massera (Armada) y Orlando R. Agosti (Fuerza Aérea).Se autodenominó  “Proceso de Reorganización Nacional” y es por eso que suele ser referida simplemente como "el Proceso".
Los golpistas tomaron al poder en un contexto de violencia creciente, caracterizado por acciones de terrorismo de Estado llevadas adelante por las Fuerzas Armadas y el grupo parapolicial Triple A y la actuación de organizaciones guerrilleras.
La Junta Militar llevó a cabo una acción represiva en la línea del terrorismo de Estado conocida mundialmente como la Guerra Sucia, coordinada con las demás dictaduras instaladas en los países sudamericanos mediante el Plan Cóndor, que contó con el apoyo de los principales medios de comunicación privados e influyentes grupos de poder civil, la protección inicial del gobierno de los Estados Unidos y la pasividad de la comunidad internacional.

El gobierno secuestró, torturó y ejecutó clandestinamente a decenas de miles de personas, sospechadas de ser guerrilleros o activistas civiles sin relación con las organizaciones armadas y estableció centros clandestinos de detención para llevar a cabo estas tareas. Las personas detenidas en estos centros clandestinos fueron conocidos como «los desaparecidos» y gran cantidad de ellos fueron ejecutados y enterrados en fosas comunes o arrojados al mar desde aviones militares. Otro perverso mecanismo implementado fue el de la apropiación de los bebés de madres en cautiverio por parte de la misma estructura militar. De esos más de 500 niños apropiados, casi 100 ya han recobrado su verdadera identidad gracias a la labor de las Abuelas de Plaza de Mayo.


La política económica del Proceso de Reorganización Nacional quedó a cargo de los sectores civiles que promovieron el golpe de estado. Bajo el liderazgo del empresario y estanciero José Alfredo Martínez de Hoz, se puso en práctica una serie de reformas económicas radicales, siguiendo las nuevas doctrinas neoliberales de la Escuela de Chicago, que tendieron a desmontar el Estado de Bienestar, desindustrializar y concentrar la economía argentina y a fomentar el sector financiero y el campo. Socialmente, el Proceso se caracterizó por aumentar notablemente la pobreza, que alcanzó a un tercio de la población, cuando en las décadas anteriores la misma no había superado el 10%.

En 1982 el gobierno militar emprendió la Guerra de Malvinas contra el Reino Unido. La derrota infligida provocó la caída de la tercera junta militar y meses más tarde la cuarta junta llamó a elecciones para el 30 de octubre de 1983, en las que triunfó el candidato de la Unión Cívica Radical, Raúl Alfonsín.
Los miembros de las tres primeras juntas del Proceso fueron enjuiciados por los delitos cometidos durante su gobierno, como consecuencia del Decreto 158/83 del presidente Alfonsín, que también creó la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep) para investigar las violaciones de derechos humanos ocurridas entre 1976 y 1983. Como resultado del Juicio a las Juntas, cinco de sus integrantes fueron condenados y cuatro absueltos. Los restantes responsables fueron enjuiciados en diversos procesos. En 1986 y 1987, a iniciativa del presidente Alfonsín, se dictaron las leyes de Punto Final y Obediencia Debida dando fin a los juicios por crímenes de lesa humanidad.


En 2003, tras iniciativas del Presidente Néstor Kirchner, las leyes de Punto Final y Obediencia Debida fueron derogadas por el Congreso de la República Argentina y los juicios se reabrieron, en tanto que la justicia comenzó a declarar inconstitucionales los indultos por crímenes de lesa humanidad que habían cometido los militares durante la última dictadura. En 2006 se han reabierto 959 causas penales, que siguen en marcha. En ese mismo año, se estableció el 24 de marzo como el Día Nacional de la Memoria y la Justicia y como feriado nacional a través de la ley 26085
Orientar, expandiendo Conciencias✾¸.★✾¸.★
imagenes de web