martes, 18 de octubre de 2011

EL TEATRO CON FIN TERAPÉUTICO ...

Andrés Sampayo Agudo. Maestro de Pedagogía Terapéutica. (¯`•.•´¯)°º)¸.•*.♥´(¯`•.•´¯)°º♫♫♫♫)¸.•*.♥´♥ Desde antaño el teatro y la expresión corporal en sus múltiples variantes ha tenido y tiene un cariz e importancia destacable, no sólo por lo que de ellos puede extraerse, sino por las ventajas y beneficios que adquieren, no ya como medio de desarrollo y expresión sino, como en el terreno que nos ocupa, el de la enfermedad mental, como un excelente fin terapéutico.
(Vladimir Kush) ¿Por qué decimos esto?, pues es evidente que con el Teatro conseguimos manifestar sentimientos, emociones o simplemente, nos divertimos, también inconscientemente trabajamos una serie de aspectos fundamentales para todo desarrollo humano, tales como la comunicación, la cooperación, capacidad de esfuerzo, integración etc., y especialmente si lo enfocamos hacia el sector de las personas con enfermedad mental en sus variados registros, éstos elementos obtienen mayor relevancia si cabe. A menudo estos sujetos presentan grandes dificultades en todo lo relacionado con la manifestación de emociones, lo cual les conduce a carencias afectivas severas y bastante significativas, y lo mismo sucede cuando hablamos de la comunicación y la interacción social, mermada por no poder desenvolverse de forma autónoma e independiente. Con la expresión corporal como uno de los recursos de los que dispone en su conjunto la actividad teatral, damos cabida a potenciar las capacidades de los enfermos, porque son capaces de demostrar sus habilidades expresivas trabajando todo su cuerpo, además de asentar o consolidarlas. Esto es básico a la hora de elaborar programas o sesiones de expresión corporal, teatro o mímica, ya que hay que tener muy en cuenta en primer lugar, las características individuales para saber realmente hasta dónde son capaces de llegar; sus habilidades socio-afectivas, comunicativas y sobre todo, de qué manera se relacionan tanto con su grupo de iguales como con el ambiente que les rodea. Para ello, buscaremos siempre llegar a ellos con sencillez, alegría, comprensión y apertura de miras, dicho de otro modo, ser muy cercano para que todo funcione adecuadamente.
Entre los contenidos esenciales de estos ejes, caben varios ejemplos dentro de una programación de carácter anual: Habilidades Sociales (improvisaciones, teatrillos, juegos cooperativos) Comunicación e interacción ( El “ Role Playing”) Expresión Corporal ( Diálogos, Mímica, Juego gestual) Así que es fácil comprobar el carácter multidisciplinar del teatro como terapia, y en su caso, el carácter rehabilitador, pero es aquí donde nos surge la pregunta, ¿es efectivamente rehabilitador?, pues a ciencia cierta podemos afirmar que aunque no constituye algo exclusivo e indispensable para servir de “ cura” milagrosa, sí que se trata de un excelente apoyo para al menos paliar o disminuir ciertas carencias, déficit o difricultades que a la persona con una determinada enfermedad le suelen afectar, y es más que probable que sí que resulte casi necesario al menos en mi opinión, de cara a solucionar muchos de los problemas que tanto los profesionales de la salud mental, las familias o los propios recursos se encuentran a menudo durante la estancia o no en un centro. Mi experiencia que por otra parte, no es muy extensa, pero sí muy válida, me dice que los resultados del proceso de rehabilitación, en muchos casos, están marcados por aquellas necesidades que son muy básicas mas para muchos desconocidas, y que con el desarrollo de la actividad teatral se alcanzan importantes logros; las personas tienen mayor confianza en si mismas, justamente porque pueden desenvolverse con soltura; son responsables ante ellos mismos y los demás, ya que sin querer adquieren conductas de cooperación y compañerismo, se expresan mejor puesto que consiguen evadirse de una dura y fría realidad para darle la vuelta a todo y ser ellos mismos; en definitiva, les ayuda a crecer y sentirse personas auténticas. La labor de los diversos profesionales tanto técnicos, educativos o sanitarios es precisamente reforzar y potenciar todas las mejoras obtenidas, y en concreto al efectuar un taller de expresión corporal o teatro, seguro que aparecen a las claras cuales son y por qué se han producido. Para todos los que les interese el trabajo con estos pacientes, les diré que empiecen por aquello que les parezca menos atractivo o estimulante, porque de ahí es de dónde se logrará el avance; la persona con enfermedad mental no hay que olvidar que es un enfermo pero que conserva una parte importante de sus facultades, y debemos ahondar en las que se han perdido o como se suele decir, se han escondido y sacarlas al a luz. Con el teatro podemos ayudarles y mucho, y con nuestra actitud todavía más; así que démosles nuestra mejor sonrisa, pongámosles una nariz de payaso, un disfraz y que explote toda la fantasía del momento, estoy convencido de que ellos en el fondo lo agradecerán, y nosotros nos sentiremos orgullosos de ello; porque hacemos grande lo más pequeño. Salud Mental Orientar...expandiendo Conciencias(¯`•.•´¯)°º)¸.•*.♥´(¯`•.•´¯)°º♫♫♫♫)¸.•*.♥´♥

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