miércoles, 25 de agosto de 2010

Beneficios de la tecnología para personas con discapacidad auditiva


Columna de Mabel Remón

Mabel Remón, única intérprete oficial de Lengua de Señas Argentina (LSA) y jefa de asesores de la Comisión de Discapacidad del Congreso de la Nación, en su columna en la emisión radial de NCO, “Desde la Redacción”, resaltó que “a las personas con discapacidad auditiva, a partir del celular, les cambió la vida con los mensajes de texto”.
Según explicó, los discapacitados auditivos, “tienen una tarifa diferenciada” porque “ellos no lo utilizan para hablar, lo usan por medio de la vista para mensajes de texto, y algo que parece tan superficial a partir de esto han podido pedir pizza o una ambulancia”.
Para el caso de la discapacidad auditiva también están los “despertadores”.

“Hace 60 años, muchos ponían los despertadores de campanilla atornillados a la cama para que vibre. Otros, lo ponían conectado al velador para que se encienda la luz”, contó.

“Hay un sistema de alarma para todas las personas con discapacidad. En Estados Unidos y en Europa, están conectados tanto a la central de salud de emergencia de su zona, como a la policía. Esa señal, que es automática, avisa si entró algún intruso al domicilio, o del llanto del bebé; se activa en el reloj, suena o vibra, tiene cinco alarmas distintas”.

Respecto a la disponibilidad de estas personas con discapacidad a los avances de la tecnología, destacó que “nosotros tenemos dentro del código aduanero que todos los productos importados están libres de impuestos cuando aquí en el país no se fabrica.

Esto va de la mano también con el tema del llamado, si uno no usa el llamado de voz y el texto es mucho más barato, es natural que se le de una tarifa telefónica más económica. No siempre pueden acceder”, y cuando lo hacen, es por medio de un “recurso de amparo”.

Asimismo, resaltó que la ley para que los mensajes de texto se comercialicen con una tarifa especial para los discapacitados “existe pero no tiene penalización, entonces nadie la cumple”.

Para este tipo de situaciones, “no hay un organismo de contralor -especificó-, salvo la CONADI, pero es un organismo de asesoramiento, la Comisión asesora; ahora está el INADI, la Defensoría del Pueblo, es decir, los mismos espacios a los que se accedía hasta este momento. No hay una secretaría para personas con discapacidad, que allí sería mucho más simple porque el Gobierno debiera afrontar todo este tipo de responsabilidades”.

Resaltó que “lo más importante para cualquier ciudadano que desee presentar un proyecto (de ley), tiene que estar incluida la penalización del incumplimiento y el organismo encargado de penalizar”.

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